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Usted a visto, alguna vez, a alguien que se halla “curado” de un dolor crónico por tomar analgésicos antiinflamatorios, opioides o infiltrarse corticoides?
En mi caso yo nunca he visto algo así, a pesar de que llevo más de 20 años dedicado al dolor!!
Que pasa con los analgésicos y el dolor crónico? Pasa que son solo paliativos, es decir, no tratan la enfermedad o el trastorno que origina el dolor sino que lo alivian solamente. Esto no quiere decir que no sean importantes, por el contrario son muy necesarios para el bienestar del paciente. Pero lo ideal sería no llevar una vida dependiente de analgésicos.
En ese orden de ideas estos medicamentos, al no tratar la causa del dolor, se deben seguir tomando de forma crónica lo que puede derivar en sus muchos efectos adversos y trastornos diferentes a su enfermedad ya existente!!
En resumen, la consecuencia de ingerir de forma crónica analgésicos antiinflamatorios como diclofenaco, ibuprofeno, ketorolaco, ketoprofeno, naproxeno, etc… o medicamentos opioides como tramadol, codeína y hasta morfina o corticoides ingeridos o inyectados, predispone a la aparición de gastritis, hemorragias gastro intestinal, dispepsia, trastornos en la coagulación, náuseas, vómito, estreñimiento, resistencia a la insulina, diabetes, hinchazón, adicción y hasta daño renal. Por tanto se crea la necesidad de tomar otros medicamentos para tratar de aliviar otros trastornos que usted antes no tenía…es a eso lo que yo llamo el “círculo vicioso de los analgésicos en dolor crónico“.
Que hacemos entonces?
Para esto lo mejor es enfocar el tratamiento del dolor desde su mismo origen, recuperar y regenerar el tejido lesionado y secundariamente se mejoraria el dolor, la inflamación y la función del tejido o articulación lesionada.
La buena noticia es que si existen tratamientos en esa dirección que se basan en la medicina regenerativa.
En Clinica Sindol contamos con esas técnicas de vanguardia que son mínimamente invasivas, que utilizan el plasma, el suero rico en factores de crecimiento o las células madres derivadas de la grasa o médula ósea de su mismo cuerpo para regenerar sus tejidos comprometidos.
Clinica Sindol, más de 20 años de experiencia tratando el dolor.
Consúltanos.